el libro de las revelaciones
“Quiero que sepan, hermanos, que la Buena Noticia que les prediqué no es cosa de los hombres, porque Yo no la recibí ni aprendí de ningún hombre, sino por revelación de Jesucristo” (Gálatas 1:11-12).
Debemos agradecer al Señor que estamos rodeados de una verdadera
nube de testigos (Heb 12:1). Demos gracias al Señor por todo lo que
sobre la fe nos han enseñado. Le damos gracias especialmente por
nuestros padres.
Sin embargo, nuestra fe en última instancia no depende de nuestros
padres, maestros, pastores o cualquiera otra persona. Nuestra fe no es
tanto una cuestión de educación, "sino por revelación de Jesucristo" (Gál
1:12). La pregunta principal de Jesús para nosotros no es: "¿Qué dice la
gente sobre el Hijo del hombre?", sino “¿Quién dicen ustedes que soy
Yo?" (Mt 16:13-15) Nadie entra en Su reino simplemente porque está
emparentado con Sus hijos. No es suficiente conocer a los que conocen a
Dios. Nosotros mismos debemos conocer a Dios (ver Jn 17:3; Mt 7:21
23).
Haz los cambios necesarios para ponerte en las circunstancias ideales
para que el Señor siga revelándose a ti personalmente. Recibe los
sacramentos. Reza a una hora específica cada día. Lee diariamente las
enseñanzas de la Iglesia en la Biblia, el Catecismo de la Iglesia Católica y
el Magisterio. Trata de ir a Misa y recibir a Jesús en la Sagrada Comunión
todos los días o tan a menudo como sea posible. Ordena tu vida para
maximizar tus oportunidades de recibir la revelación divina de Jesús para
ti.
Oración: Jesús, que pueda sentarme a Tus pies y escuchar Tus palabras (Lc 10:39)
Promesa: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu espíritu, y a tu prójimo como a ti mismo" (Lc 10:27).
Alabanza: Claudio y Rita tienen cinco hijos. Rezan juntos un rosario todos los días y ofrecen cada decena por el bienestar de un niño. Nuestra Señora del Rosario, ruega por nosotros.
Referencia:
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de octubre al 30 de noviembre de 2024. Otorgado el 3 de abril de 2024. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.