llamados
“...no porque podamos atribuirnos algo que venga de nosotros mismos, ya que toda nuestra capacidad viene de Dios. Él nos ha capacitado para que seamos los ministros de una Nueva Alianza” (2 Corintios 3:5-6).
El padre Al Lauer, fundador y autor por mucho tiempo de Un Pan, Un Cuerpo, le gustaba enseñar que no es tan importante estar calificado para un ministerio, sino ser llamado. Quiso decir que, si Dios nos ha llamado a un ministerio, Él proveerá la sabiduría y los dones espirituales necesarios para llevar a cabo ese ministerio (ver Catecismo de la Iglesia Católica, 2004).
Cuando sabemos que somos llamados por Dios a un ministerio y que Dios está proveyendo lo que necesitamos para ese ministerio (Catecismo, 2000), esto genera confianza. “Es Cristo el que nos da esta seguridad delante de Dios” (2 Co 3:4). Ahora nos vemos a nosotros mismos como colaboradores de Dios (1 Co 3:9). Sabemos que cualquier problema que surja es de Él para resolverlo, no nuestro. “El que los llama es fiel, y así lo hará” (1 Tes 5:24).
Entonces, en lugar de preocuparnos o estresarnos por los problemas, los llevamos a Él en oración. Escuchamos a Dios por Sus respuestas. Hacemos lo mejor que podemos con gran confianza en Dios, en lugar de en nuestra propia capacidad para lograr cualquier cosa. Aunque somos probados tanto por Dios (ver 1 Tes 2:4) como por otros, nos regocijamos en Aquel que nos llamó. ¡Gracias, Jesús, Señor de nuestro ministerio!
Oración: Padre, abre mis oídos para escuchar Tu llamado en mi vida y abre mi corazón para escucharlo.
Promesa: “…el que los cumpla y enseñe [los mandamientos], será considerado grande en el Reino de los Cielos” (Mt 5:19).
Alabanza: Jaime, aunque comprometido con Regina, sintió tan fuertemente el llamado al sacerdocio que rompió su compromiso para ingresar al seminario. Regina no solo lo apoyó, sino que lo ayudó en su discernimiento escuchándolo desinteresadamente y orando con él. Es sacerdote desde hace varias décadas.
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de junio al 31 de 2023 julio de 2023. Otorgado el 1 de febrero de 2023. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.