cicatrizado
“Que nadie me moleste en adelante: yo llevo en mi cuerpo las cicatrices de Jesús” (Gálatas 6:17).
Jesús murió por nuestros pecados. Si no hubiéramos pecado, no habría habido necesidad de la muerte en sacrificio de Jesús en el Calvario en expiación por nuestros pecados. En otras palabras, cuando cometemos un pecado sexual, chismeamos, comemos demasiado, nos negamos a evangelizar o no perdonamos, estamos directamente involucrados con la pasión y muerte de Jesús (ver Catecismo de la Iglesia Católica, 598).
Todos los cristianos aceptan el hecho de que nuestros pecados y la muerte de Jesús están relacionados, pero para muchos esto es solo una idea o un resumen teológico. Sin embargo, el Espíritu Santo cambiará eso al convencernos de nuestros pecados (Jn 16:8) y llevarnos a la cruz. Allí experimentaremos profundamente cómo nuestros pecados hirieron a Jesús hasta la muerte. Los pecados del mundo ya no nos divertirán ni entretendrán (ver Prov 10:23). Seremos crucificados para el mundo y el mundo para nosotros (Gál 6:14).
Esta experiencia personal de la cruz no es necesariamente una experiencia mística. El Espíritu Santo puede simplemente darnos una idea del daño de las influencias sutiles en nuestra vida. El resultado de esto será una profunda alienación de los caminos pecaminosos del mundo. Odiaremos intensamente el pecado (ver Ecl 17:21) y amaremos a los pecadores, como lo hace el Señor.
Oración: Padre, envía el Espíritu para convencerme del pecado y ser ajeno a los caminos del mundo.
Promesa: “La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen al dueño de los sembrados que envíe trabajadores para la cosecha” (Lc 10:2).
Alabanza: “En cuanto a la resurrección de los muertos, ¿no han leído en el libro de Moisés, en el pasaje sobre la zarza ardiente, lo que Dios le dijo: 'Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, el Dios de Jacobo?’” (Mc 12:26) Señor Jesús, Tu resurrección nos da esperanza.
Referencia:
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de junio de 2022 al 31 de julio de 2022. Otorgado el 18 de noviembre de 2021. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.