cuidados cardíacos
"Concede entonces a tu servidor un corazón comprensivo" (1 Reyes 3:9).
Salomón pidió y recibió "un corazón sabio y prudente, de manera que no ha habido nadie como tú" (1 Re 3:12). Sin embargo, "en la vejez de Salomón, sus mujeres le desviaron el corazón hacia otros dioses, y su corazón ya no perteneció íntegramente al Señor, su Dios, como el de su padre David" (1 Re 11:4). Salomón, el dueño de lo que era el mejor corazón del mundo, sufrió insuficiencia cardíaca debido a su pecaminosidad, especialmente la idolatría.
En este primer sábado del mes, pensamos en el corazón inmaculado de María. Su corazón era aún mejor que el de Salomón, pero no sufrió la insuficiencia cardíaca. Más bien, su corazón fue traspasado muchas veces, sobre todo en el Calvario, "así se manifestarán claramente los pensamientos íntimos de muchos" (Lc 2:35). Por medio del corazón fiel, sufriente, inmaculado de María, podemos recibir ayuda para aceptar las gracias de su Hijo para resistir las tentaciones y así evitar la insuficiencia cardíaca. Si nuestros corazones ya han fracasado, María está orando desde su corazón por nuestro arrepentimiento.
Prevenga o recupérese de un ataque cardíaco. Acepta a María como tu madre (Jn 19:25ss) e intercesora (ver Jn 2:5). "Con todo cuidado vigila tu corazón" (Prov 4:23).
Oración: Sagrado Corazón de Jesús, haz mi corazón como el Tuyo (ver Mt 11:29).
Promesa: Jesús "se compadeció de ellos, porque eran como ovejas sin pastor, y estuvo enseñándoles largo rato" (Mc 6:34).
Alabanza: San Ansgar nació en Francia. Sin embargo, el entusiasmo de evangelizar lo llevó a Alemania, Dinamarca y Escandinavia a difundir el evangelio.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 29 de noviembre de 2017.
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