metanoia
"¡Conviértanse y crean en la Buena Nueva!" (Marcos 1:15).
Jesús comenzó Su ministerio público proclamando un mandamiento directo y un desafío a todos los que vio. Proclamó la necesidad de arrepentirse y convertirse. La palabra arrepentirse en este texto del pasaje del Evangelio es la palabra griega metanoia. Esta palabra no significa simplemente lamentar nuestros pecados, según sea apropiado. La palabra significa literalmente dar la vuelta e ir en la dirección opuesta. Este arrepentimiento significa hacer un giro de 180 grados en nuestras vidas si la dirección en la que viajamos nos alejaba de Dios. Esta Cuaresma, la Palabra de Dios nos dice: "Busquen al Señor mientras se deja encontrar" (Is 55:6) y "Búsquenlo con un empeño diez veces mayor" (Bar 4:28).
La segunda cosa que Jesús manda, además de arrepentirse, es creer en el evangelio (Mc 1:15). Es posible cambiar nuestra dirección, pero no seguir caminando por el camino del Señor. Si es así, somos como el hombre que sacó la basura de su vida, pero nunca se dejó llenar de la gracia de Dios (véase Lc 11:24-26). Como no llenó su corazón con el Espíritu Santo, las cosas del mundo, la carne y el diablo llenaron el vacío de su vida, y el estado final del hombre fue peor que el primero (2 Pe 2:20-21).
Debemos arrepentirnos y creer. Debemos dar la vuelta, caminar en el sendero de la rectitud, seguir caminando, y llenar nuestras mentes y corazones con el Evangelio (Sal 25:4-5, 8-9).
Oración: Jesús, sé que tienes sed (Jn 19:28) por el arrepentimiento, tanto el mío como el de todos los que conozco. Que pueda dedicar mi vida a guiar a la gente a Tu misericordia amorosa y perdonadora.
Promesa: "Cristo murió una vez por nuestros pecados –siendo justo padeció por la injusticia– para llevarnos a Dios" (1 Pe 3:18).
Alabanza: ¡Gloria a Dios! Jesús ha resucitado y nos resucitará de entre los muertos. ¡Alabado sea Jesús para siempre!
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 29 de noviembre de 2017.
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