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Viernes, 16 de noviembre de 2018

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santa Margarita de Escocia
santa Gertrudis la Grande


2 Juan 4-9
Salmos 119:1-2, 10-11, 17-18
Lucas 17:26-37

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el futuro ahora

"En los días del Hijo del hombre sucederá como en tiempo de Noe. La ente comía, bebía y se casaba, hasta el día en que Noé entró en el arca y llegó el diluvio, que los hizo morir a todos" (Lucas 17:26-27).

Muchas personas no estarán preparadas para el final del mundo. Este también fue el caso con la inundación de Noé, la destrucción de Sodoma y Gomorra y otras catástrofes. Por lo tanto, para estar preparados para el futuro, debemos estar preparados en el presente para cualquier cosa.

¿Estás listo para el fin del mundo y la última venida de Jesús ahora? ¿Estás listo para morir ahora? ¿Estás listo para ser martirizado por Jesús ahora? Si no estamos listos para morir ahora, entonces no estamos listos para vivir la vida abundante en Cristo.

Para estar listos para cualquier cosa ahora, debemos vivir en y para Jesús solamente. Jesús es nuestra única esperanza, y la única esperanza que necesitamos. Jesús es el Señor del pasado, el presente y el futuro (ver Heb 13:8). Jesús es el único Nombre "dado a los hombres, por el cual podamos alcanzar la salvación" (Hch 4:12). Sin Jesús, no podemos hacer nada (Jn 15:5). En Jesús, nada es imposible (Lc 1:37). Jesús es Dios, Quien "es Amor, y el que permanece en el amor permanece en Dios, y Dios permanece en Él" (1 Jn 4:16). "Por lo tanto, ya no hay condenación para aquellos que viven unidos a Cristo Jesús" (Rom 8:1). Cuando Jesús es nuestra Vida (ver Jn 14:6; 11:25), tenemos vida eterna. En Jesús, escaparemos de la ira venidera (1 Tes 1:10), porque el Señor tiene planes para nuestro bienestar, no para el infortunio, planes para darnos un futuro lleno de esperanza (Jer 29:11). Dale tu vida totalmente a Jesús ahora. Luego mira hacia adelante con alegría hacia el futuro.

Oración:  Padre, haz que todos los que lean esto sean santos en cada aspecto de su conducta (1 Pe 1:15).

Promesa:  "Ustedes estén alerta para no perder el fruto de sus trabajos, de manera que puedan recibir una perfecta retribución" (2 Jn 8).

Alabanza:  Santa Margarita ha sido llamada la madre y la reina ideal. Aprendió la fe de su padre inglés y su madre húngara y se la enseñó a su esposo e hijos escoceses.

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 3 de mayo de 2018

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