¿Cómo nos relacionamos con la oposición en nuestra vida cotidiana? ¿Qué es lo que leemos? ¿A quién escuchamos? Debemos "matar" al enemigo, es decir, la tentación dentro de nosotros "por nuestro celo"— para obedecer la ley de Dios y ser purificados para echar fuera aquello que nos aleja del Señor (ver 1 Mac 2:26). La gente "hace una alianza con la muerte" (Is 28:15) eligiendo diariamente la muerte en las cosas pequeñas. Matatías reconoció la hora de su visita y estaba listo para elegir al Señor y hacer los cambios necesarios en su estilo de vida. De este modo, Matatías, "creció y mató" las tentaciones (ver 1 Mac 2:24).

Nadie puede servir a dos señores (Mt 6:24). No podemos "repartir el asunto'" (1 Re 18:21) entre el mundo y el Señor. "Porque el que quiere ser amigo del mundo se hace enemigo de Dios" (Stg 4:4; Fil 3:19).

Son las cosas pequeñas que dejamos entrar en nuestras vidas — los artículos de las revistas, los videos de YouTube, los espectáculos de televisión — lo que nos hace reconocer o perder el tiempo de nuestra visita (ver Lc 19:44). La gente a menudo escoge la muerte en asuntos pequeños día a día. Si no se cambia esta tendencia, después de un tiempo nos hemos alejado de Dios tanto que fácilmente perdemos Su visita a nosotros. Por otro lado, podemos buscar al Señor diariamente. La Misa diaria, la oración diaria, la lectura de la Biblia nos construye día a día un puesto de firme compromiso con el Señor. La elección está ante ti, vida o muerte. Escoge vida (Dt 30:19).

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 10 de mayo de 2017.

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