El Señor revela en la Biblia que es desastroso para los cristianos demandar a otros cristianos. Esto lleva a herir y engañar a los que pueden habernos herido y engañado (1 Co 6:8). Demandar a otros cristianos puede hacernos irreverentes y privarnos de heredar el reino de Dios, a pesar de que hemos sido "purificados, santificados y justificados en el nombre de nuestro Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios" (1 Co 6:11). Incluso si tenemos una demanda justa, es mejor "sufrir la injusticia" y dejarnos engañar en lugar de demandar a un cristiano (1 Co 6:7; ver también Mt 5:39ss). Esto se aplica a demandar a cualquier cristiano, incluyendo aquellos tan mundanos como lo fueron los Corintios.

Al igual que los Corintios, los cristianos de hoy no prestan mucha atención a la prohibición bíblica contra la demanda a los cristianos. ¿Cuántos cristianos conoces que se niegan a llevar a otra persona a los tribunales porque esa persona es un cristiano? ¿No hemos visto la verdad bíblica demostrada cuando los cristianos de hoy son objeto de desastre tras desastre? ¿No hemos visto también a la multitud de cristianos volverse cada vez más profanos en lugar de más santos? La verdad bíblica ha sido demostrada una vez más, y las "mejores ideas" de nuestra cultura han fracasado de nuevo. La sabiduría de Dios no es la misma que la sabiduría de este mundo (1 Co 2:6ss). Vive de acuerdo con la sabiduría de Dios. Vive la Biblia.