rut, muerte y bautismo
"Pero también murieron Majlón y Quilión, y Noemí se quedó sola, sin hijos y sin esposo" (Rut 1:5).
El esposo de Rut, el suegro y el cuñado habían muerto. Todos estos hombres se habían trasladado a Moab para escapar de la muerte por hambre (Rt 1:1), pero sólo retrasaron la muerte por diez años (Rt 1:4).
Rut venció a la muerte para siempre (1 Co 15:54) por su fidelidad a Noemí en obediencia a Dios. Ella invierte el proceso de la muerte al casarse con Boaz, dando a luz a Obed, y convirtiéndose en la bisabuela de David (Rt 4:22). Fue a partir de la familia de David que vino Jesús. Jesús es la Resurrección y la Vida (Jn 11:25), vencedor de la muerte.
¿Cómo podemos derrocar el reino de la muerte? Conquistamos a la muerte al ser bautizados en Jesús. De esta manera, entramos en la familia del Dios vivo, Creador y Sustentador de la vida y el Vencedor de la muerte. Vivimos nuestra nueva vida en el Bautismo por la obediencia fiel al Señor.
Rut anticipa nuestra victoria bautismal sobre la muerte. Derrotamos a la muerte entrando en la familia de Jesús y viviendo una nueva vida de fidelidad y obediencia a Él.
Oración: Padre, hazme cada vez más consciente de haber sido bautizado en Cristo Jesús (Rom 6:3).
Promesa: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu" (Mt 22:37)
Alabanza: El mayor logro del Papa san Pío X fue la promoción de la Eucaristía.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 14 de abril de 2015
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