¿listo para la gran sorpresa?
"Lo mismo sucederá el Día en que se manifieste el Hijo del hombre" (Lucas 17:30).
El fin del mundo será como en tiempo de Noé en que la mayoría de los humanos desconocerán su inminente destrucción (Lc 17:27; ver también Lc 17:28-29).
El fin del mundo no sólo será sorprendente sino que también vendrá de repente. No habrá tiempo alguno para hacer preparaciones de última hora (Lc 17:31).
La única forma de estar preparados para el fin del mundo y la llegada final de Jesús es perder nuestra vida por amor a Jesús (Lc 17:33). Esto hacemos al decidir vivir ya no por nosotros mismos sino por Jesús (2 Co 5:15). Debemos decidirnos a negar nuestra propia voluntad, tomando la Cruz de Jesús a diario y siendo discípulos de Jesús (Lc 9:23). Cuando optamos por hacer Su voluntad en vez de "nuestras cosas" (ver Mt 26: 39), habremos sido crucificados con Cristo. Entonces ya no es que vivimos sino es Cristo que vive en nosotros (Gal 2:19-20). Sólo cuando estamos en Cristo y él en nosotros estaremos listos para Cristo y el fin del mundo.
Cristo vendrá cuando menos lo esperamos (Lc 12:40). Vendrá "repentinamente, como los dolores de parto sobre una mujer embarazada, y nadie podrá escapar" (1 Tes 5:3). Si estás viviendo en Cristo y él en ti, estás listo. Por lo tanto, clama "¡Maranata!" "Ven, Señor Jesús" (Ap 22:20) hoy, ¡en este momento!
Oración: Padre, quiero estar listo.
Promesa: "Porque, a partir de la grandeza y hermosura de las cosas, si llega, por analogía, a contemplar a su Autor" (Sab 13:5).
Alabanza: Santa Francisca Javier Cabrini abandonó su sueño de evangelizar en la China al obedecer a Dios y trabajó con los pobres de los Estados Unidos.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 15 de junio de 2015.
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.