Herodías odiaba a Juan e intentaba matarlo, pero no podía (Mc 6:19). Un día se presentó la ocasión favorable. Herodes festejaba su cumpleaños (Mc 6:21). Herodías reconoció inmediatamente la oportunidad que se presentaba, tomó la iniciativa (ver Lc 16:8), obtuvo "la mayor ventaja del momento actual" (ver Ef 5:16), y logró su objetivo brutal. Esta fue quizás la única oportunidad que tendría Herodías, y ella no la perdió.

Entonces les dijo: "Síganme, y yo los haré pescadores de hombres" (Mt 4:19). Debemos hacer discípulos capturando a los hombres y a las mujeres en el momento en que están listos para volver al Señor. Dios puede presentar una oportunidad de evangelización cuando un compañero de trabajo tiene un momento de disposición, tal vez cuando esté sufriendo y necesita amor, tal vez después de la pérdida de un ser querido cuando se necesita seguridad, tal vez una palabra para corregir cuando se ven atrapados en el pecado. Esto es lo que los buenos pescadores hacen cuando capturan un pez, cuando el pez tiene hambre, no cuando es conveniente para el pescador. Por lo tanto para ser un pescador exitoso de hombres y mujeres, es mejor que estés presente y listo para aprovechar el momento adecuado. Nadie atrapa un pez mientras se relaja en su sofá.

Jesús enseñó que el mundano toma más iniciativas que la gente espiritual (ver Lc 16:8). Herodías estaba dispuesta a cometer el mal, se preparó y estaba presente cuando llegó su oportunidad, y lo consiguió. ¿Cuánto más nosotros los que seguimos a Jesús debemos estar listos para hacer el bien? Debes estar preparado, listo, y siempre en posición. Vayan, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos (Mt 28:19).

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 8 de augusto de 2013

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