trabajo silencioso
"Esta tenía una hermana llamada María, la cual sentada a los pies de Jesús, oía su palabra." —Lucas 10:39
Jesús vivió en la oscuridad y silencio de Nazaret durante casi treinta años antes de Sus tres años de ministerio público. Saúl, luego de una de las conversiones más grandes de la historia, no se lanzó al ministerio. El describió los tres años luego de su conversión: "Inmediatamente, sin buscar consejeros humanos, o ni siquiera ir a Jerusalén a ver aquellos que eran apóstoles, me fui a Arabia; luego regresé a Damascos" (Gal 1:16-17). No sabemos lo que hizo Saúl en Arabia y Damascos, pero es probable que se haya sentado "a los pies de Jesús, y oído Su palabra" (Lu 10:39). Antes de cualquier ministerio significante para el Señor, necesitamos años de escucha en lugares como Nazaret, Arabia o Damascos, culminando en nuestros propios cuarenta días de silencio en el desierto.
En la lectura del Evangelio de hoy, el Señor tal vez no le haya estado diciendo a Martha que dejara de trabajar completamente, sino que orara y escuchara primero. Luego así podría trabajar en el poder del Espíritu. Porque necesitamos oír al Señor antes de trabajar para El, debemos ser rápidos para oír y lentos para hablar y actuar (Jas 1:19).
Tal vez esto explique por qué el demonio nos mantiene tan ocupados y nos hace tan ruidosos. Él sabe que si no escuchamos a Dios, no creeremos en Él (Ro 10:17). Entonces nunca haremos el trabajo de Dios, que es "tener fe en el Enviado de Dios" (Jn 6:29). Haz silencio, escucha y trabaja.
Oración: Padre, calla mi alma (Sal 131:2) y abre mis oídos (Is 50:4).
Promesa: "María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada." Lucas 10:42
Alabanza: San Denis y dos compañeros fueron decapitados por su fe durante una persecución en Paris. Sus cuerpos fueron tirados al Rio Siena y luego rescatados por compañeros cristianos. ¡Gloria a ti, Señor, por sumergir y sepultar nuestra antigua naturaleza en las aguas del Bautismo, y levantarnos a una nueva vida en Jesús!
Rescripto: †Muy Reverendo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 13 de augusto de 2012
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