la obediencia conduce a la sanación
“Ojalá mi pueblo me escuchara…” (Salmos 81:14).
En el pasaje del Evangelio de hoy, Jesús atravesó territorio gentil pagano, hasta “la Decápolis” (Mc 7:31). “Entonces le presentaron a un sordomudo y le pidieron que le impusiera las manos” (Mc 7:32). Estos gentiles tenían una fe similar a la de los camilleros judíos que rompieron el techo y presentaron a un paralítico a Jesús para que lo curara (Lc 5:18-19). ¿Cómo llegaron estos gentiles paganos a tener tal fe?
Ya en el Evangelio de Marcos, Jesús había expulsado una gran cantidad de demonios de un hombre (Mc 5:2-13). Jesús le había dicho que regresara a su casa y proclamara la misericordia de Dios a su familia (Mc 5:19). Pero, el hombre sanado dio testimonio no solo a su familia y ciudad natal, sino que también “se fue y comenzó a proclamar por la región de la Decápolis (diez ciudades) lo que Jesús había hecho por él y todos quedaban admirados” (Mc 5:20).
Cuando Jesús expulsó a la “legión” de demonios del endemoniado (Mc 5:9), el hombre sanado le preguntó a Jesús si podía seguirlo (Mc 5:18). “Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: ‘Vete a tu casa con tu familia, y anúnciales todo lo que el Señor hizo contigo al compadecerse de ti ‘” (Mc 5:19). Su testimonio obediente preparó a la Decápolis para el siguiente milagro, la sanación del hombre sordomudo.
El Señor puede asignarnos tareas que no son de nuestra preferencia. ¿Le obedeceremos a pesar de todo? Como lo hizo en la Decápolis, Dios puede usar nuestra obediencia de maneras que no podemos prever.
Oración: Padre, “que no se haga mi voluntad, sino la tuya” (Lc 22:42). Úsame en la forma que Tu elijas
Promesa: “Todo lo ha hecho bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos” (Mc 7:37).
Alabanza: El joven Roberto tomó la decisión de dejar atrás su pasado, depositar su vida en las manos de Dios y afrontar las novedades que trae cada día (ver Fil 3:13; Lam 3:23).
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de febrero de 2024 al 31 de marzo de 2024. Otorgado el 26 de julio de 2023. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.