¿cada cuánto debo orar por los muertos?
Por una leve corrección, recibirán grandes beneficios, porque Dios los puso a prueba y los encontró dignos de Él. Los probó como oro en el crisol y los aceptó como un holocausto” (Sabiduría 3:5-6).
El Señor lo ha dejado claro por varias tradiciones judías (ver 2 Mc 12:43-44), la Iglesia primitiva (ver Mt 12:32), y los Padres de la iglesia que es nuestro deber orar por aquellos quienes han muerto. Como la Iglesia pide por los difuntos en la Misa de cada día, se puede afirmar que el Espíritu Santo nos conduce a orar a diario por los muertos. Sin embargo, necesitamos preguntarle al Espíritu Santo con qué frecuencia debemos orar por los difuntos. Es importante servir a los difuntos tanto como el Señor quiere porque ellos dependen enormemente de nosotros y nuestras oraciones hacen una gran diferencia para ellos.
San Agustín predicó: “No se puede dudar de que se les ayuda a los difuntos con las oraciones de la santa Iglesia, con el sacrificio salvador y con las limosnas que se otorgan en favor de sus almas” (Sermón 172, san Agustín, 2). San Agustín nos exhortó que mostremos “solicitud y cuidado y empeño al ofrecer por ellos aquellas cosas que ayudan a los espíritus de los difuntos — limosnas, oraciones, y súplicas” (ibid).
Ora por los difuntos cada día y con la frecuencia que el Señor pida. “Concedeles el descanso eterno y brille sobre ellos la luz perpetua. Que sus almas y las almas de todos los fieles difuntos descansen en paz por la misericordia de Dios, amén”.
Oración: Espíritu Santo, ven en ayuda de mi debilidad porque no sé orar como es debido por los muertos (ver Rom 8:26).
Promesa: “Lo que es corruptible debe revestirse de la incorruptibilidad y lo que es mortal debe revestirse de la inmortalidad” (1 Co 15:53).
Alabanza: El Purgatorio es la antecámara del cielo; es “la sala de espera” de Dios. Por su misericordia, Él permite que oremos por las almas difuntas y las asistamos en el paso final a la visión beatífica.
Referencia:
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de octubre al 30 de noviembre de 2022. Otorgado el 14 de marzo de 2022. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.