¿orgulloso de ser humilde?
"Tu corazón se llenó de arrogancia y dijiste: «Yo soy un dios; estoy sentado en un trono divino, en el corazón de los mares». ¡Tú, que eres un hombre y no un dios, te has considerado igual a un dios!" (Ezequiel 28:2).
El príncipe de Tiro no tuvo ningún reparo en mostrar su arrogancia. Tuvo la osadía de proclamar: "Yo soy un dios". El príncipe de Tiro pensó que era más sabio que Daniel (Ez 28:4) y personalmente responsable de la acumulación de sus riquezas (Ez 28:5).
Aunque en estos tiempos varias personas siguen el ejemplo del príncipe de Tiro y hacen alarde de su arrogancia, la mayoría de los cristianos saben que debemos dar a Dios toda la gloria (Sal 115:1) y reconocer públicamente que sin Jesús no podemos hacer absolutamente nada (Jn 15:5). Nuestras vidas dependen totalmente de la gracia y misericordia de Dios en cada segundo para siempre. Aunque nosotros, los cristianos, nos unimos a las voces celestiales y damos al Señor "la riqueza, la sabiduría, la fuerza y el honor, la gloria y la alabanza" (Ap 5:12), podemos ser como Pedro diciendo: "Tú sabes que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido. ¿Qué nos tocará a nosotros?" (Mt 19:27) Las palabras de Pedro implican un orgullo y algo menos que una entrega total al Señor.
¿Cómo podemos morir a nosotros mismos (ver Jn 12:24; Lc 9:24), vivir nuestros Bautismos, y ser verdaderamente humildes y no sutilmente orgullosos? Estamos indefensos. Pidamos la gracia y la misericordia de Dios.
Oración: Padre, eres la única Esperanza que tengo y que necesito.
Promesa: "Y el que a causa de mi Nombre deje casa, hermanos o hermanas, padre, madre, hijos o campos, recibirá cien veces más y obtendrá como herencia la Vida eterna" (Mt 19:29).
Alabanza: El Papa san Pío X era el siervo del pueblo de Dios. Si recibiste tu Primera Comunión siendo un niño, alaba a Dios hoy por la decisión del Papa san Pío X por incluirte hace más de un siglo. "Jesús les dijo: 'Dejen a los niños, y no les impidan que vengan a mí'" (Mt 19:14).
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 19 de enero de 2018
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