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Viernes, 1 de julio de 2016

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san Junípero Serra


Amós 8:4-6, 9-12
Salmos 119:2, 10, 20, 30, 40, 131
Mateo 9:9-13

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fámelico

"Mi alma se consume, deseando siempre tus decisiones" (Salmos 119:20).

En nuestro egoísmo e injusticia, nos estamos preparando para tener hambre de oír la Palabra del Señor (Am 8:11). Cuando pecamos, contribuimos a una sociedad que cierra sus oídos y corazones a la Palabra de Dios. En muchas empresas, la Palabra de Dios no es bienvenida ni tolerada. Para los cristianos, como yo, que trabajan en este tipo de condiciones de hambre de la Palabra de Dios en el lugar de trabajo, anhelamos Su Palabra. Durante nuestro tiempo en el trabajo, decimos: "Yo deseo tus mandamientos... no me ocultes tus mandamientos" (Sal 119:40,19). "Abro mi boca y aspiro hondamente, porque anhelo tus mandamientos" (Sal 119:131). El hambre por oír la Palabra de Dios da como resultado una anorexia espiritual generalizada, pérdida de la vista, y más personas desmoralizadas y desfallecidas (Prov 29:18).

La Palabra de Dios, especialmente la palabra profética, trae la vida en lugar de huesos muertos (Ez 37:4ss). Ésta trae luz, fortaleza, nutrición, visión, sabiduría, coraje y victoria. También trae persecución a los que la propagan.

Jesús ve a su pueblo hambriento y ordena a sus discípulos: "Apacienta mis ovejas" (ver Jn 21:15-17). ¿Vas a difundir la Palabra del Señor y ayudar a detener la hambruna?

Oración:  Señor Jesús, no solo de pan vamos a vivir sino de toda palabra que sale de tu boca (Mt 4:4). Ayúdanos a hacer nuestra parte en la difusión de Tu Palabra y detener la hambruna.

Promesa:  "Es misericordia lo que quiero y no sacrificios" (Mt 9:13).

Alabanza:  San Junípero trabajó para salvar almas en España, México y California. Bautizó a más de seis mil indios americanos durante su ministerio.

Referencia:  (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 18 de febrero de 2016.

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.