oración o fracaso
"Al oír las palabras "resurrección de los muertos", unos se burlaban y otros decían: "Otro día te oiremos hablar sobre esto" (Hechos 17:32).
"Los Apóstoles daban testimonio con mucho poder de la resurrección del Señor Jesús y gozaban de gran estima" (Hch 4:33). Pablo, el último de los apóstoles (1 Co 15:9), también fue testigo de la energía para el Cristo resucitado, excepto cuando predicó en Atenas. Allí, mientras que unos pocos creían, otros se burlaban de Pablo (Hch 17:32), y lo llamaron un "charlatán" (Hch 17:18), y se negaron a tomarlo en serio. En Atenas, Pablo pareció haber perdido su poder, su unción por el Espíritu.
Al igual que Pablo, podemos ver menos energía en nuestra oración, el ministerio, el matrimonio, la familia, o testimonio. Estamos en la Atenas de nuestras vidas. Otros no parecen tomar en serio nuestras vidas cristianas. Nos sentimos como fracasados. Necesitamos el Espíritu avivado en llamas en nuestras vidas (2 Tim 1:6).
Mañana, celebraremos la fiesta de la Ascensión. Al día siguiente, empezamos nueve días de oración, tal como lo hicieron los discípulos en el primer Pentecostés cristiano. Debemos orar para que nuestras Confirmaciones sean renovadas. Debemos reprimir la carne y ser despertados en el Espíritu, en lugar de lo contrario (Gal 5:17). Si no oramos para recibir un nuevo Pentecostés, seguiremos en la futilidad de Atenas. María, los otros santos, y los ángeles están orando para que podamos recibir el Espíritu Santo. Unámonos a ellos, y oremos en estos próximos días como nunca antes. Jesús prometió: "Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a aquellos que se lo pidan" (Lc 11:13). ¡Ven, Espìritu Santo!
Oración: Jesús, enséñame a orar por la llegada del Espíritu Santo (ver Lc 11:1).
Promesa: "Cuando venga el Espíritu de la Verdad, él los introducirá en toda la verdad" (Jn 16:13).
Alabanza: Aunque Patrick había estado viviendo en el Espíritu por años, él oró por una nueva efusión, y recibió nuevas gracias para su ministerio en santidad y poder.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 21 de enero de 2016.
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