¿tiempo pervertido?
"El Señor borró sus pecados y exaltó su poderío para siempre" (Eclesiástico 47:11).
Herodías odiaba a san Juan Bautista porque la señalaba como adúltera (Mc 6:18-19). Cuando ella dijo que quería la cabeza de Juan, su hija la interpretó literalmente, agregó a su petición y pidió a Herodes: "Quiero que me traigas ahora mismo, sobre una bandeja, la cabeza de Juan Bautista" (Mc 6:25). Herodes le concedió su pedido. Así un mesero caminando con la cabeza de Juan sobre una bandeja pudo haber sido parte de la "diversión" en la fiesta de cumpleaños de Herodes.
Por decirlo suavemente, Herodes era un pervertido. Fue pervertido en y por el adulterio y en y por el asesinato. Luego cuando Herodes supo de Jesús, él proyectó su perversión e identificó mal a Jesús. "Pero Herodes, al oír todo esto, decía: 'Este hombre es Juan, a quien yo mandé decapitar y que ha resucitado" (Mc 6:16). Satanás había torcido la mente y el corazón de Herodes a lo largo de muchos años, durante y después del horrible pecado, desde el adulterio hasta el asesinato, de tal manera que cuando Herodes escuchara de Jesús, él podría ciertamente llegar a conclusiones equivocadas y vivir una existencia sin Cristo para siempre.
En este momento, muchos de nosotros estamos siendo enceguecidos, insensibilizados, y pervertidos por el pecado. Dentro de poco, puede ser que tengamos nuestra mejor o aun última oportunidad de reconocer a Jesús como nuestro Señor y Dios. Arrepiéntete ahora. Empieza a regresar a la realidad. Jesús viene pronto. No Lo pierdas.
Oración: Padre, "que yo pueda ver" (Mc 10:51).
Promesa: "En todas sus obras rindió homenaje al Santo Altísimo, con palabras de gloria; cantó himnos de todo corazón, mostrando su amor por su Creador" (Eclo 47:8).
Alabanza: Santa Águeda todo lo tuvo como pérdida excepto la preservación de su relación plena con Cristo. Cuando le ofrecieron la oportunidad de escapar del martirio convirtiéndose en prostituta, ella exclamó: "Solo Cristo es mi vida y salvación" y fue ejecutada como mártir.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 10 de noviembre de 2015.
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.