¿vivo en el espíritu?
"Y cuando abra sus tumbas y los haga salir de ellas, ustedes, mi pueblo, sabrán que yo soy el Señor. Yo pondré mi espíritu en ustedes, y vivirán" (Ezequiel 37:13-14).
El Señor mandó a Ezequiel que caminara en varias direcciones a través de un valle de huesos secos (Ez 37:1-2). Luego le preguntó a Ezequiel si esos huesos podrían regresar a la vida (Ez 37:3). Ezequiel no estaba seguro de que pudieran, pero después de que él obedeció el mandato del Señor para que profetizara a los huesos, estos revivieron (Ez 37:10).
El Señor hizo surgir al gran papa Juan Pablo II, el papa-profeta, para que nos señalara el valle de los huesos secos sobre los que caminamos. Él lo llamó una "cultura de muerte". El Papa Juan Pablo II y el Papa Pablo VI profetizaron que esta cultura de la muerte daría paso a una "civilización de amor", si somos dóciles a la acción del Espíritu Santo (ver El Tercer Milenio,18).
Por lo tanto, arrepiéntete (ver Hch 2:38), obedece (Hch 5:32), y agita el fuego del don del Espíritu Santo (2 Tim 1:6-7). "«Así habla el Señor: Ven, espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos para que revivan». Yo profeticé como él me lo había ordenado, y el espíritu penetró en ellos. Así revivieron" (Ez 37:9-10). ¡Ven, Espíritu Santo!
Oración: "Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor".
Promesa: "Jesús le respondió: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu. Este es el más grande y el primer mandamiento. El segundo es semejante al primero: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas»" (Mt 22:37-40).
Alabanza: María, una adolescente humilde, se elevó a las alturas (Lc 1:52) como la Reina de los cielos y la Tierra. ¡Alabado sea Dios que premia a su amado por su servicio a Él!
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 23 de abril de 2014
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.