demasiado, demasiado
"Lo encontraron totalmente demasiado para ellos"(Mateo 13:57).
El Señor nos manda entregar el diezmo y nos llama a dar limosna. Sin embargo, pocos cristianos dan el diezmo, y menos aún limosna, aunque muchos piensan que están dando limosna cuando en realidad sólo están entregando una parte del diezmo. Para la mayoría de la gente, el Señor pide demasiado.
Jesús nos manda orar siempre y no perder el ánimo (Lc 18:1). ¿No que te parece esto excesivo incluso demasiado?
Venimos al Señor a pedir la salvación. Más aún, él quiere llevarnos al arrepentimiento, a la salvación, a la libertad, la evangelización y el ministerio además de curarnos. Sólo queríamos sentirnos mejor, pero el Señor tiene todas estas otras cosas en mente.
Nosotros nos contentamos con pertenecer a nuestra parroquia y a participar en algunas prácticas religiosas. Pero Jesús no parece estar tan contento con nosotros como lo estamos nosotros. Él nos dice que debemos amarlo con todo el corazón, alma, mente y todas nuestras fuerzas (Mc 12:30) y que lo vendamos todo para obtener su Reino (Mt 13:44-46). Ahora bien, ¿no es eso ir demasiado lejos y pedir demasiado?
Oración: Jesús, cuando crea yo que Tu estés pidiendo demasiado, que dirijas mi mirada hacia Ti, crucificado.
Promesa: "Entonen un canto, toquen el tambor y la cítara armoniosa junto con el arpa." (Sal 81:3)
Alabanza: San Eusebio se aferró a la verdad, aún después de ser arrastrado por las calles y encarcelado.
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro de nuestro equipo editorial).
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 5 de mayo de 2013
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