un corazon para los que rompen corazones
"El amor de Dios se manifiesta en nuestros corazones a través del Espíritu Santo, Quien nos ha sido dado" (Romanos 5:5).
En la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, el Señor quiere que su amor fluya en nuestros corazones. Él desea darnos tanto amor que no nos importaría dar nuestras vidas (Cfr. 1Jn 3:16) aún por aquellos que han pecado contra nosotros y continúan hiriéndonos con su pecado (Cfr. Rom 5:8). Este amor es verdaderamente supernatural, crucificado, misterioso y divino.
Piensa sobre la persona que te resulta más difícil amar. Por lo general esta persona es un miembro de la familia, tal vez pueda ser el esposo o esposa. Piensa en la persona que tú tiendes a juzgar. Piensa en aquel que representa, para ti, todo lo peor de este mundo. En esta festividad solemne, el Sagrado Corazón de Jesús quiere hacer un milagro de amor en tu vida. Él te da la gracia de amar a tu peor enemigo (Cfr. Mt 5:44). De esta manera imitas a Jesús quien murió por nosotros quienes le crucificamos a causa de nuestros pecados.
"Jesús, manso y humilde de corazón, haz mi corazón como el Tuyo" (Cfr. Mt 11:29). Jesús, cuyo corazón fue herido, desangrado, coronado de espinas y perdonador, haz mi corazón como el tuyo.
Oración: Sagrado Corazón de Jesús, pongo toda mi confianza en tu amor sacrificado.
Promesa: "Yo mismo apacentaré a mis ovejas y las llevaré a descansar –oráculo del Señor– Buscaré a la oveja perdida, haré volver a la descarriada, vendaré a la herida y curaré a la enferma…" (Ez 34:15-16).
Alabanza: ¡Toda alabanza, honor y gloria sea para el Sagrado Corazón de Jesús!
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 1 de marzo de 2013
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.