pirómano
"Señor, ¿quieres que mandemos caer fuego del cielo para consumirlos?" (Lucas 9:54).
Cerca del final del ministerio público de Jesús, los samaritanos no permitieron que Jesús y sus discípulos pasaran a través de su pueblo porque ellos se dirigían hacia Jerusalén. Los apóstoles Juan y Santiago preguntaron a Jesús si quería que mandaran caer fuego del cielo para consumirlos (Lc 9:52-54). Jesús se dio vuelta y los reprendió. (Lc 9:55).
Jesús eventualmente permitió a Juan hacer caer "fuego del cielo" sobre los samaritanos; más eran lenguas de fuego bendito. Felipe había llevado al Evangelio en el poder del Espíritu a los samaritanos que no conocían el mensaje. Ellos recibieron la Palabra de Dios (Hch 8:5ss). "Cuando los Apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que los samaritanos habían recibido la Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Estos, al llegar, oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo" (Hch 8:14-15). Juan impuso sus manos sobre aquellos a quienes él había deseado anteriormente incinerar y el fuego de Dios, el Espíritu Santo, bajó sobre ellos para consumirles con el amor de Dios (Hch 8:17).
¿Existen personas o grupos de personas que no te molestaría si Dios les quitara de esta Tierra? ¡Imagínate si Jesús eventualmente te utilizara como su agente para traer a estas personas a una nueva vida en el Espíritu! Si debemos amar a nuestros enemigos, necesitamos esa misma conversión que Juan experimentó. ¡Arrepiéntete! Perdona y ama a tus enemigos (Lc 6:35). "Recibe el Espíritu Santo" (Jn 20:22).
Oración: Jesús, envía el fuego del Espíritu Santo para ablandar la dureza en mi corazón. ¡Que pueda yo guiar a miles a recibir el Espíritu!
Promesa: "Déjanos ir contigo, porque hemos oído que Dios está contigo" (Zac 8:213).
Alabanza: Santa Teresita escribió: "Vi y me di cuenta... que el amor es todo... abraza todo tiempo y lugar... que el amor es eterno."
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 5 de junio de 2013
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