Jesús ha provisto todo lo posible para que lo recibamos. Él dio su vida por nosotros. Él nos dio Su poder y autoridad por medio de la Iglesia (Mt 10:1). Mientras colgaba en la cruz, nos dio a Su madre (Jn 19:27). Jesús también nos dio a Sus ángeles. A lo largo de Su vida en la tierra, los ángeles ascendieron y descendieron sobre Él. El arcángel Gabriel estaba allí en el momento de la concepción de Jesús (Lc 1:26ss). Coros de ángeles cantaron en Su nacimiento (Lc 2:13). Los ángeles le servían después de las tentaciones en el desierto (Mc 1:13). Un ángel estaba con Jesús en el huerto de Getsemaní (Lc 22:43), así como en el huerto donde resucitó de entre los muertos (Mt 28:2).

   Después de Su Ascensión, Jesús envió a estos ángeles para ministrarnos (Heb 1:14), y vemos en los Hechos de los Apóstoles una extensa actividad angelical en la Iglesia primitiva. Esto también debería ser cierto para la Iglesia de hoy. Si los ángeles no están trabajando en tu vida o en tu iglesia, probablemente no les estés pidiendo que hagan nada por falta de fe.

   Ahora mismo, pídele a Miguel que te ayude a reclamar tu victoria sobre el diablo (Ap 12:7-8). Pídele a Gabriel que te dé una buena noticia (Lc 1:26). Pídele a Rafael que sane tu ceguera y te guíe (Tob 11:7, 12; 12:15).

Rescripto:  Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de agosto al 30 de septiembre de 2023. Otorgado el 15 de marzo de 2023. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.