el llanto de mamá
"Al ver a la madre… Jesús le dijo: ‘Mujer, aquí tienes a tu hijo’. Luego dijo al discípulo: ‘Aquí tienes a tu madre'" (Juan 19:26-27).
Cuando una madre llora, un poder especial conmueve el corazón de cada miembro de la familia. Cuando llora mamá, nos sentimos obligados a hacer las paces y obedecerla. La Madre María nos dice que hagamos lo que Jesús nos diga (Jn 2:5). Entonces, cuando ella llora, resulta que Jesús es obedecido.
Jesús “dirigió durante su vida terrena súplicas y plegarias, con fuertes gritos y lágrimas, a Aquel que podía salvarlo de la muerte” (Heb 5:7), más la mayoría lo ignoraron. Pero cuando la madre María llora, nos afecta de manera distinta. Nos conmueven sus lágrimas a no permanecer impasibles. Nuestro corazón podrá estar endurecido, calloso y frío, pero cuando la vemos llorar, atravesada por una espada, el pensamiento de nuestro corazón queda descubierto (Lc 2:35). Vemos nuestra insensibilidad hacia el Salvador crucificado. Cuando la vemos llorar al pie de la cruz, notamos que no lloramos cuando deberíamos hacerlo (Jn 19:25).
¡Qué preciosas son las lágrimas de una madre que caen sobre un mundo seco y frío! "Estaba la Madre dolorosa junto a la Cruz, llorosa, en que pendía su Hijo" (Stabat Mater).
Oración: Jesús, que me avergüence por no llorar ante de Tu cruz.
Promesa: "Simeón, después de bendecirlos, dijo a María, la madre: ‘Este niño será causa de caída y de elevación para muchos en Israel; será signo de contradicción’" (Lc 2:34).
Alabanza: María hizo un viaje extenuante hacia Egipto, el temor de perder a su hijo de doce años, un encuentro con su Divino Hijo encaminado al Calvario y Su crucifixión. Nuestra Señora La Dolorosa, ruega por nosotros.
Referencia:
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de agosto al 31 de septiembre de 2020. Otorgado el 11 de febrero de 2020. Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.