"cerca de la cruz, cerca de la cruz"
"Sí, Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en Él no muera, sino que tenga Vida eterna" (Juan 3:16).
"La cruz excelsa al contemplar Do Cristo allí por mí murió, nada se puede comparar a las riquezas de su amor". Este himno tradicional simplemente dice que cuando miramos a la cruz, podemos cambiar dramáticamente.
"Verán al que ellos mismos traspasaron" (Jn 19:37). "Al verlo expirar así, el centurión que estaba frente a Él, exclamó: '¡Verdaderamente, este hombre era Hijo de Dios!' " (Mc 15:39) Cuando vemos a Jesús levantado en la cruz, tal como Moisés levantó la serpiente en el desierto, somos arrastrados a creer y "tener vida eterna en Él" (Jn 3:14-15; 12:32). Pablo transformó los corazones más duros al decir "no quise saber nada, fuera de Jesucristo y Jesucristo crucificado" (1 Co 2:2). Él proclamó el evangelio mostrando delante de los ojos de todos a Jesucristo en la cruz (Gal 3:1).
¿Considerarías devotamente contemplar diariamente por 10 segundos a una representación de Jesús en la cruz? Esta oración en acción será la ocasión para que Jesús te transforme en una nueva persona. Proclamarás con Pablo "Yo solo me gloriaré en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo está crucificado para mí, como yo lo estoy para el mundo" (Gal 6:14).
Oración: Jesús, que siempre viva conscientemente en la sombra de Tu cruz.
Promesa: "Se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte y muerte de cruz. Por eso, Dios lo exaltó y le dio el Nombre que está sobre todo nombre" (Fil 2:8-9).
Alabanza: "¡Te adoramos, Oh Cristo y te bendecimos, porque con tu santa cruz redimiste al mundo!"