sufrimiento privilegiado
"Tendamos trampas al justo" (Sabiduría 2:12).<br> "Condenémoslo a una muerte infame" (Sabiduría 2:20).
Dos semanas a partir de hoy celebramos el Viernes Santo. Ese día, recordaremos que Jesús sufrió y murió por amor a nosotros. También recordaremos que en nuestra propia carne "completamos lo que falta a los padecimientos de Cristo, para bien de su Cuerpo, que es la Iglesia" (Col 1:24) Jesús ha dejado espacio para incluir nuestros sufrimientos en su plan de redención.
Jesús nos bendijo cuando dijo: "Felices ustedes, cuando sean insultados y perseguidos, y cuando se los calumnie en toda forma a causa de mí. Alégrense y regocíjense entonces, porque ustedes tendrán una gran recompensa en el cielo" (Mt 5:11-12; ver también Sab 2:22) Que seamos "dichosos de haber sido considerados dignos de padecer por el nombre de Jesús" (Hch 5:41). Que nuestras vidas sean "distinta de los demás" (Sab 2:15) para que nos consideren privilegiados (Fil 1:29) de sufrir "ultrajes y tormentos" (Sab 2:19) por practicar la justicia (Mt 5:10).
"Alégrense en la medida en que puedan compartir los sufrimientos de Cristo" (1Pe 4:13) "Si sufre por ser cristiano… que no se avergüence y glorifique a Dios por llevar ese nombre" (1Pe 4:16). Sufre, alégrate y ama.
Oración: Padre, acepto tu gracia de cargar mis cruces cada día (Lc 9:23). Que sepa participar de sus sufrimientos, hasta hacerme semejante tu Hijo en la muerte (Fil 3:10).
Promesa: "El Señor está cerca del que sufre y salva a los que están abatidos" (Sal 34:19).
Alabanza: La familia de san Isidoro estaba unida en la fe; lo que dio grandes frutos. Isidoro fue un Obispo y dos de sus hermanos y su hermana fueron santos canonizados.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 18 de diciembre de 2013
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