< <  

Viernes, 12 de septiembre de 2014

  > >

El Santo Nombre de María


1 Corintios 9:16-19, 22-27
Salmos 84:3-6, 12
Lucas 6:39-42

Ver Lecturas en Inglés
Reflexiones Similares

tan ciego como un murciélago en el infierno

"¿Puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en un pozo?" (Lucas 6:39).

Debido a nuestra naturaleza herida por el pecado, todos nosotros sufrimos de ceguera espiritual. Antes de nuestra redención por Cristo, no había otra posibilidad. Esto se aplicaba incluso a los líderes religiosos que andaban como ciegos espirituales. Antes de Cristo, estábamos condenados a caer en el pozo de la esclavitud, en el odio a nosotros mismos, en la condenación y el infierno. Antes de Cristo, estábamos condenados a guiar incluso a la gente que más queremos a un pozo de una autodestrucción aterradora y eterna.

Jesús nos salvó de la ceguera espiritual, del pozo del infierno y la destrucción eterna de incluso aquellos que amamos. A causa de lo que Jesús hizo por nosotros, debemos:

  • agradecerle a Él siempre (1Tes 5:18; Ef 5:20),

  • aceptar su gracia para superar todas las tentaciones de pecar y así nunca volver a la ceguera,

  • predicar el Evangelio (1Co 9:16),

  • hacernos los esclavos "de todos, para ganar el mayor número posible" (1Co9:19),

  • hacer todo lo que hacemos "por amor a la Buena Noticia" (1 Co 9:23) y

  • sacrificarnos y dominar los deseos de la carne para que perseveremos en la fe (1Co 9:27) y alcancemos aun los corazones más duros.

Jesús nos salvó de un destino peor que la muerte. ¡Gracias, Jesús!

Oración:  Padre, compartiré mi fe porque la vida eterna de otra gente depende de ello.

Promesa:  "Saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la paja del ojo de tu hermano" (Lc 6:42).

Alabanza:  Alabanzas a Ti, Espíritu Santo, por cubrir a María, Tu Esposa, con tu sombra (Lc 1:35). "No hay nada imposible" para Ti (Lc 1:37).

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 23 de abril de 2014

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.